BLACK OR WHITE

Hubo una vez un niño pequeño, de raza negra (no se trata de mi), que vivía en el seno de una familia humilde en EE.UU., él era el pequeño de cinco hermanos, el cabeza de familia trabajaba en la industria siderúrgica, pero su vocación frustrada era la música, era un gran aficionado a la guitarra eléctrica.

Un buen día decidió que sus cuatro hijos mayores formaran un conjunto musical, del cual por supuesto él sería su representante, pero tras ver actuar a su hijo pequeño en una función del colegio, se dió cuenta que era el que tenía un talento extraordinario y decidió incluirlo en el conjunto.

Era un padre estricto, no consentía un sólo fallo en una nota o en la coreografía, los sometía a largas sesiones de ensayos, desatendiendo incluso las obligaciones escolares de sus hijos, les gritaba y les pegaba, lo único importante para él era que todo saliera perfecto.

Grabaron un disco y fue un gran éxito, con lo que consiguió contratar giras para actuar en directo a lo largo y ancho del país.

Sin duda alguna el pequeño se convirtió en la gran estrella del grupo, pese a contar con tan sólo 8 años, fue un niño sin embargo triste, sin tiempo alguno para jugar con otros niños de su edad, sin tiempo para madurar convenientemente. Ese niño llegó a la pre-adolescencia y empezaron los primeros problemas, sus hermanos y su padre se burlaban de él,(creo que por envidia),por la anchura de su nariz, también por su acné incipiente, de hecho hubo un tiempo en que no quería actuar en público para que no le vieran la cara. Las diferencias aparecieron entre el padre y los hijos, estos últimos habían crecido y querían hacer sus vidas, mientras el padre intentaba retenerlos, tratando de rentabilizar el éxito de la banda.

Tras los problemas matrimoniales de los padres, el hijo pequeño se aisló en su mundo, creando su primer disco en solitario con tan sólo trece años "Got to be there" 1972, le siguieron "Ben", "Music and me", "Forever" y "Of the wall" en 1974, con el que gano su primer Grammy, pero sin duda su mayor éxito fue "Thriller", el disco más vendido de la historia, su fama y su éxito creció desmesuradamente al mismo tiempo que su ego, y decidió operarse de su nariz, ponerse un hoyuelo en la barbilla, al mismo tiempo que su piel iba clareandose de forma alarmante, se compró un rancho decorandolo como si de un feria o parque temático se tratara.

Los siguientes trabajos aún siendo buenos, como por ejemplo "bad", no llegaron a la altura de "Thriller", cimentando su carrera a partir de entonces en su tremendo directo y en varias recopilaciones de sus éxitos.

La fama y su falta de infancia fueron factores que su mente no supo digerir, pero sería un error echar la culpa de su transformación de chico introvertido a un individuo prepotente que se autocalificó como el rey del pop, a la dureza de su padre y su cruel educación, puesto que al final el que decide por donde transcurre el camino es uno mismo.

Decía él que padecía de vitíligo, es una enfermedad por la cual se pierde la pigmentación de la piel, es algo que nunca sabremos si era verdad o no, pero eso unido al resto de sus transformaciones y a su complejo adolescente de sus rasgos africanos hace al menos cuestionable semejante afirmación, para convertirse en un desprecio para su propia raza.

Sin embargo hay que reconocer que fue un fuera de serie, alguien que llevaba la música dentro, un enorme bailarín, con un directo espectacular y un enorme talento que nos deja grandes joyas musicales, y aunque no es de recibo su autoproclamación como rey del pop, quizá lo fuera y con esa etiqueta pasará a la historia.

No puedo evitar sentir su muerte, quizá por que crecí con su música, con sus impresionantes y novedosos video-clips y aún reconociendo su arrogancia, aún reconociendo que se había convertido en un monstruo física y mentalmente, fue, es y será MICHAEL JACKSON