martes, 1 de junio de 2010

LA FRONTERA









Aunque ya hace bastante tiempo que no voy, me gusta frecuentar la zona de los pirineos,el pirineo Aragonés, el Navarro, el Catalán. He de confesar que tengo especial debilidad por el Navarro, allí me siento realmente libre, me calma el paisaje, los bosques, los lagos, el murmullo de los ríos.


Las cabras campan a sus anchas, pero lo mejor de todo es que no hay casi nadie, se escucha el silencio y en pleno Julio hace frío por las noches.


Quesos aromáticos, buenos vinos, truchas, paté de hongos, carnes asadas, etc.



Es un lugar cercano a la frontera con Francia, subes al valle de Belagua desde Isaba(en pleno valle de Roncal) y sin darte cuenta estás en otro país. Nadie te dice nada, no hay ningún guardia fronterizo ni nada por el estilo, si acaso alguna vaca pastando.



La gente de sus pueblos llevan otro ritmo, pausado, sin prisas, con una amabilidad increíble. Pueblos como Ochagavia, Irati, Roncal( hay un museo dedicado a un tenor Julián Gayarre, donde conservan su laringe en formol) y por supuesto su mausoleo obra de Benlliure (una autentica locura).


Cuando alguien me habla de vacaciones, se me iluminan los ojos y pienso en sus interminables montañas, en sus bosques de hayas, en sus mezclas de colores, en su aire limpio y puro, donde te dejas llevar por la mente y olvidas tus preocupaciones.




Atrás muy lejos, la ciudad, el gris, el ruido, la suciedad y un deseo de no volver a ese mundo, de no traspasar la frontera del paraíso, de poderte quedar un día más.


2 comentarios:

  1. ....un día más o dos o tres....
    un beso Iñigo.

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  2. Bonitas fotos y bonitos paisajes....lo tengo enla lista de pendientes
    Un abrazote

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